Artículo sobre Mirandilla y sus Pedrajas en el blog muy torista y muy campero de Mariano Cifuentes Sánchez "Los Coquillas de Cifuentes"
Desde que Fabrice Torrito, un francés romántico y audaz desembarcó en el viejo cortijo de Mirandilla, los Pedrajas del Marqués de Albaserrada han comenzado un proceso de renovación.
En Mirandilla, la sombra de José Luis García de Samaniego y Queralt, el Marqués de Taracena, se esconde detrás de cada piedra. El Marqués, como todo el mundo le llamaba cariñosamente, antes de fallecer en 2014, perdió la única exclusiva que tuvo importancia en su vida ; por culpa de Arrojado, el toro de Nuñez del Cuvillo que indultó Manzanares, el novillo Laborioso del Marqués dejó de ser el único astado indultado en la historia de la Maestranza. Antes de eso, durante toda su existencia, el Marqués fue para los aficionados y los taurinos el " Marqués de Albaserrada ".
Desde hace años, bastante antes de la muerte de don José Luis, la ganadería de Albaserrada había entrado en un penoso letargo, mientras que sus Pedrajas sufrían un anonimato que constrastaba con su pasado glorioso. Si bien esta segunda ganadería del Marqués nunca alcanzó la fama de la primera cimentada sobre los Saltillos, a partir de su creación en 1947 y durante medio siglo, mantuvo viva la llama del encaste Pedrajas, actualmente también en decadencia. La decisión de seguir con la tradición ganadera tras la venta de los Albaserradas a José Bueno en el año 1929 fue tomada por la hija del Marqués, Isabel Queralt López Mequiza, y por su esposo, José García Samaniego, padres de José Luis García de Samaniego y Queralt. Optaron entonces por comprar a Rafael Romero de la Quintana - el administrador de Pedro Domecq y Díez - la parte de la ganadería de Juan Pedro Domecq Nuñez de Villavicencio, su padre.
En ella se mezclaban las sangres de Veragua, Conde de la Corte y Mora Figueroa. Los ganaderos, que apostaban por la bravura, se encontraron con una mansedumbre penosa cuando lidiaron su primera corrida en Écija, el año de la compra. Ante el chasco, adquirieron sesenta becerras y el semental Figurito de Isaías y Tulio Vázquez, ganadería procedente de García Pedrajas, con el fin de apostar casta y viveza. Gracias a este refuerzo, poco a poco, la sangre de los Pedrajas se adueño de las reatas de la rama Domecq y los nuevos Albaserradas adquirieron identidad propia. Prontos y bravos, aunque bastante correosos, vivos y ásperos, nunca fueron del gusto de las figuras y sí de los aficionados, quienes se apasionaron con sus peleas, sobre todo en novilladas.
El primer triunfo tuvo lugar en Palma de Mallorca cuando un joven Antoñete le cortó las orejas y el rabo al espléndido Buenafecha, premiado con la vuelta al ruedo en 1952. Otras cuatro orejas paseó el Cordobés, en 1961 en Aguilar de la Frontera, ante una espléndida novillada. El mismo año Rafael de Paula cortó tres orejas en Antequera.
Cuando José Luis tomó el relevo de sus padres, recordaba con mucha frecuencia : " Lo primero que vendí, fue una novillada para la Maestranza. Aquel 12 de Octubre de 1965 obtuvo el indulto de Laborioso.
Laborioso fue un novillo bravísimo que tomó cuatro puyazos galopando.
Luego no se cansó de embestir en la muleta, aunque lidiado en una novillada, era un cuatreño, puesto que en esa época estaba permitido. " Salto en quinto lugar y los cuatro primeros habían sido muy nobles. Era hijo de la vaca Laboriosa, de Pedro Domecq y del toro Sultan de Isaías y Tulio Vázquez. Le correspondió a Rafael Astola, que venía de torear en Madrid, y le costo estar delante pues resultó muy exigente.. Embestía con codicia y no perdonaba nada. A Astola sólo le concedieron una oreja, y aquella cicatería presidencial todavía le duele, hasta que murió después de padrear durante doce años, lo visitaba a menudo en su cercado de Mirandilla. El semental tuvo 400 crías y marcó en profundidad la evolución de la ganadería.
La gran mayoría de los toros que se lidiaron en la década siguiente eran hijos o nietos de Laborioso, regalando sus mejores años a la ganadería del Marqués. Juan Posada cortó el rabo a Pastor en Ciudad Real y en 1973, premiaron a Señorito con una vuelta al ruedo en Madrid después de tomar seis varas y derribar dos veces. Los triunfos más trascendentales llegaron a finales de los setenta, cuando Revoltoso fue declarado el mejor toro de San Fermín 79 después de tomar cinco varas de derribar tres veces y ser premiado con la vuelta al ruedo.
En 1984, en una portátil montada en Zarauz, ocurrió uno de esos sucesos que tejen la leyenda de la Fiesta. Cuando José Ortega Cano estaba a punto de hacerse banderillero, muy mermado por las cornadas y el maltrato de las empresas, se encontró frente a dos toros del Marqués de Albaserrada que le hicieron sentir el toreo más hondo. Años después, siendo ya primera figura, el diestro tuvo el gesto de acudir a Mirandilla a tentar y de brindarle una vaca al ganadero. No obstante, cuando más tarde el Marqués le pidió a Ortega un semental de sus Pedrajas para refrescar su ganadería, el matador respondió que no podía . cuando compró los Pedrajas de María Luisa Pérez Domínguez de Vargas, los hijos los hermanos Guardiola, le hicieron prometer que nunca vendería a terceros un pitón de este encaste.... a pesar de que, recientemente, lo han mandado al matadero.
Después de los años de triunfo, vinieron los del desencanto, cuando el exceso de consanguinidad causados por las 400 crías de Laborioso favoreció la caida.
Cuando la ganadería del Marqués de Albaserrada desaparecía progresivamente del panorama taurino y sólo lidiaba de vez en cuando en las plazas toristas de menor importancia. Fabrice Torrito, llegó a Sevilla cuando la Expo del 92. Le contrataron seis meses en la Expo, en el pabellón francés, donde atendía a los visitantes. Todo el tiempo libre lo pasaba visitando ganaderías. Tuvo una primera experiencia profesional en la ganadería de Sánchez Ibargüen ; seis mese como vaquero.
Y después, en la Calera de Lora Sangrán, lanzando el turismo taurino.
En el 2000 llegó a Mirandilla, también para desarrollar un proyecto turístico. Tenía 30 años, trabajó de vaquero, tractorista. Cuando el viejo mayoral, Benito Quinta, se jubiló en 2009, la familia optó por confiar en Fabrice, que aportaba su experiencia en el turismo y, en aquel momento, se veía como un negocio añadido fundamental.
Don José Luis, el Marqués, estaba ya mayor y se dejaba aconsejar por sus amigos.
En uno de los cercados, una novillada muy en tipo Pedrajas esperaba la visita de una comisión francesa interesada por presentar la nueva generación de los Albaserradas que, hace treinta años, tenían un gran cartel en el país vecino. En otro, se encontraba una de las dos corridas, la vendida para Aignan, plaza vecina a Vic.
Opinaba Fabrice que ese encaste adquiere su verdadera personalidad cuando pasa a los cinco años. Antes, se define menos.
Con mucha habilidad Fabrice ha trabajado la imagen de los Pedrajas a través de su blog donde cuenta el día a día de la ganadería.
Con sencillez, habla de la selección, de los esfuerzos realizados para volver a encontrar la sangre diluida..... Maruchi es más torista que su esposo don José Luis.
Recien nombrado mayoral, Fabrice no tardó en convencer a la ganadera para refrescar y aportar, de nuevo, la sangre Pedrajas a la ganadería.
En 2011, compraron dos toros de Tulio Vázquez. En 2016 tuvieron los primeros utreros. Cuando Fabrice visitó el mítico cortijo de Valdevacas, donde siempre pastaron los toros de Tulio e Isaías Vázquez, su corazón se estremeció. Sólo quedaba de aquello 60 vacas.
Pero Fabrice no se dió por vencido. Hurgando por todas partes compró dos machos de Yerbabuena a unos peruanos que compraron la finca y la ganadería de Ortega Cano. Se quedaron sólo con lo de Jandilla y quitaron lo de Pedrajas. Le compraron cuatro erales, los tentaron y dejaron dos.Uno de ellos fue extraordinario.
De los Pedrajas, los toreros no quieren saber nada. Es un toro más vivo, listo, astuto.
Fabrice ha sabido vender puentes con la afición francesa desarrollando actividades de eco-turismo.
El 90% de los grupos que pasan por Mirandilla proceden de Francia : jubilados, peñas taurinas, colegios o empresas.
Además del turismo verde Fabrice ha creado la asociación " Torrito Afición ". Cuando organiza sus
jornadas, vienen a Mirandilla de todas partes de Francia, y para los herraderos, hay más franceses que reses por herrar.
Le deseamos a Fabrice Torrito que consiga la recuperación del encaste PEDRAJAS.