Obra de Enrique Aznalfarache
Me confirmó que era muy difícil motivar en estudiar a un chaval que tiene los toros en la mente. Siendo este profesor muy aficionado a la cultura taurina, tuvo que cerrar muchas veces los ojos y mostrarse muy comprensivo. Pero su ética profesional le forzaba a visitar a menudo a los padres de las criaturas para avisarles de un abandono descarado de estudios.¡Sobre todo, tenía la obligación de descargar su responsabilidad cuando el aprendiz torero faltaba a clase, o mejor dicho hacía novillos! HACER NOVILLOS*.
Aquí tenemos otra expresión muy taurina que se utiliza en el habla de todos los días. No me resisto a imaginar que el origen de este dicho viene de cuando los maletillas se introducen en las fincas ganaderas y torean a campo abierto becerras, vacas y algunas veces (muy pocas) novillos o toros, burlando a vaqueros y mayorales.
Es una forma muy poética de decir que en vez de estar donde debería estar : estudiando en su aula, está el chaval toreando en la dehesa, engañando a padres, profesores y hombres de campo, satisfaciendo su sueño de pegar unos cuantos capotazos o muletazos a una vaca vieja o a un novillo de desecho.
* en français, cette expression équivaut à “Faire l’école buissonnière”
Aucun commentaire:
Enregistrer un commentaire